Gran museo del mundo maya |
Desde un principio teníamos la intención de visitar dos museos en Mérida pero estábamos dispuestos a sacrificarlos para visitar más sitios de la selva, sin embargo nuestro último fracaso en Chansuytún nos hizo regresar a la capital de Yucatán con tiempo suficiente.
Primero nos dirigimos a la prolongación del paseo Montejo, donde recientemente fue construido el gran museo del mundo maya. Se trata de una gran construcción en un estilo bastante contemporáneo, pues tiene en su parte superior una gran estructura redondeada que parece una pelota de ligas blancas y verdes entrelazadas. Sin embargo la exposición se ubica abajo en una gran galería de color blanco y abarca la vida de los mayas desde el primer poblamiento de la región hasta la actualidad.
Tapa de bóveda de Ek Balam |
Por supuesto la parte que más nos interesaba era la prehispánica, aunque hay también aspectos interesantes de la colonia, la guerra de castas, la prehistoria y la actualidad. Algunas de las piezas que más me llamaron la atención fueron una bella tapa de bóveda procedente de Ek Balam que muestra al gobernante Ukit Kan Let Tok sentado en posición de flor de loto y parece señalar algo frente a él. Los detalles y los glifos que se aprecian todos en color negro están finamente pintados, lo que le da a ésta pieza una delicada belleza que es difícilmente igualada en otras pinturas de su tipo.
Hay también fragmentos y estelas completas bien conservadas, una de ellas es la parte inferior de la estela 1 de Dzilam González que alguna vez estuvo empotrada en la presidencia municipal de aquel lugar con un soldado grabado en su parte superior.
Sin duda la pieza que yo más quería apreciar ahí son los murales de Mulchic, pequeño sitio cercano a Santa Elena que visité en el 2015 junto con nuestro amigo Luis Adrián. En ese entonces sabíamos que éstas pinturas estaban en Mérida, probablemente en una bodega pues no habían sido mostradas en mucho tiempo pero con la inauguración de éste museo eso cambió.
Fragmento de los murales de Mulchic |
Los murales están ya muy borrosos pero se alcanza a distinguir una serie de personajes que participaban en una batalla, algunos de ellos con trajes muy ornamentados. Eran mucho más vívidos cuando se encontraron y tenían tonos amarillos, rojos y azules, además de trazos negros.
Me pareció una buena exposición aunque desde afuera el museo luce inmenso y ya por dentro tuve la impresión de que es más pequeño de lo que parece, aún así es el más grande que conozco junto con el Amparo de Puebla, obviamente dejando fuera al Museo Nacional de Antropología.
Museo del palacio Cantón |
Luego de salir de ahí, avanzamos unos pocos kilómetros hacia el centro de Mérida y llegamos al bello palacio Cantón, un edificio de principios de siglo que alberga el museo regional de Yucatán. Desde que el gran museo del mundo maya se inauguró gran parte de su colección fue mudada ahí pero tuvimos en suerte que poco tiempo antes habían inaugurado una exposición llamada "Lak'iin. El poderío del oriente maya", la cual reunió piezas importantes de Ek Balam, Chichén Itzá, Kulubá y algunos otros sitios de la región.
Sabía que varias piezas que no encontramos en el pequeño museo de sitio en Kulubá estaban ahí, como una cabeza de serpiente que indica la influencia de Chichén Itzá en dicho sitio pero que conserva un estilo diferente; eso complementó la visita que habíamos hecho dias antes.
Estela de Tabí |
Una vez que entramos por la puerta del edificio, tuvimos frente a nosotros la bella y rara estela de Tabí, la cual es por excelencia la pieza central de éste museo; es una escultura única pues no es una piedra sólida sino una especie de marco con dos personajes a los lados y otro en su centro, cuyos espacios intermedios fueron completamente vaciados de roca, dejando ver a través de ellos. En la parte superior un arco está inscrito con una serie de glifos e igualmente tiene un espacio vacío por debajo de éstos.
En los dos pisos del edificio se mostraban una buena cantidad de piezas en piedra, oro, jade, concha, turquesa, etc. Todas de una calidad inigualable. Algunas que destaco es un pánel con jugadores de pelota que proviene del sitio de Ichmul de Morley, unos pendientes de jade de Chichén Itzá y una serie de tapas de bóveda de Ek Balam.
La exposición es una de las mejores y más interesantes que he podido ver en cualquier museo antropológico; sin embargo hace aproximadamente un mes terminó su periodo de exhibición.
Panel de Ichmul de Morley |
Al terminar nuestra visita a éstos museos también terminaba el recorrido que realicé junto con Eduardo y Julio, pues ellos regresarían al día siguiente a Querétaro y la Ciudad de México respectivamente, así que solamente nos quedaba comer tarde como siempre y luego retirarnos al hotel. Todos empacamos nuestras cosas y dormimos un poco más temprano que los días precedentes. Muy temprano ellos salieron rumbo al aeropuerto y hora y media después yo también me retiré de ahí pues me faltaban algunos días para completar mi recorrido; pero ésta vez seguiría más al sur, en el estado de Campeche, donde mi amigo Wilberth me esperaría en el centro de Hecelchakán para dirigirnos a una región que yo nunca había visitado: los Chenes.