sábado, 23 de septiembre de 2017

Viaje a Yucatán y Campeche pt. 21. Chunhuhub y Xcochkax

Chunhuhub
Después de resolver el problema con el auto, salimos con rumbo a Chunhuhub, un sitio abierto al público casi en el límite de Yucatán y Campeche; ése lugar se me escapó un año antes debido a que mi cámara se me cayó en el sitio de Yaxché-Xlapak cuando ya íbamos de salida y tuve que volver a buscarla, la encontré al último momento, cuando ya me había rendido.

Ésta vez llegamos rápidamente y por fin se me hizo conocerlo. Al llegar, Wilberth se quedó con los custodios para convencerlos de que nos llevaran al cercano Xcochkax y yo entré solo. Es un lugar muy pequeño el que se puede visitar; desde que se entra se ven varios montículos de piedra pero nada de muros en pie hasta que de pronto se tiene a la vista un sobrio y hermoso edificio que es un ejemplo notable de la arquitectura tipo Puuc.
Chunhuhub

Éste palacio fue visitado por John Lloyd Stephens y Frederick Catherwood en el siglo XIX, al parecer era más grande pues muestra restos de habitaciones detrás de lo que se aprecia en pie aunque ya no se puede ver bien la forma de todo el edificio.

Tiene 6 habitaciones en pie divididas a la mitad por un acceso con escalinata que llevaba a una plataforma más alta, éstas habitaciones tienen decoraciones en forma de columnillas y algunas grecas en su base y en la parte superior de la fachada.

Frente a la plataforma que le sostiene hay un montículo con algunos restos en su parte superior, desde ahí tuve una muy buena vista al palacio y estuve casi todo el tiempo mirando desde ahí y rodeando las habitaciones en pie.
Xcochkax

Finalmente salí por la parte trasera de la plataforma del palacio y rápidamente llegué a la caseta de servicio, ahí tienen algunas piezas de piedra con decoraciones y estelas del lugar, así como una jamba con grabados de Xcochkax.

Uno de los dos custodios se ofreció a llevarnos al siguiente sitio y salimos en el auto unos cuantos kilómetros, de pronto nos indicó que entráramos en una corta terracería y avanzamos hasta la base de un cerro bajo pero muy empinado. Nos contó que habían estado trabajando en la restauración del sitio en meses pasados; varios de nuestros amigos habían estado ahí antes y sabíamos que se encontraba bastante dañado, con solo secciones de los edificios en pie.
Entrada con jeroglíficos

Nuestra sorpresa al llegar a casi a lo más alto de Xcochkax fue mayúscula: todo el sitio estaba reconstruido, al menos en el primer nivel que se puede apreciar; las paredes lucían bastante blancas, como nuevas y grandes secciones de bóvedas estaban colocadas sobre ellas. En mi opinión éste tipo de trabajo es sumamente cuestionable pues viendo la gran diferencia y lo que quedaba en pie me parece que una reconstrucción ahí es algo que no puede sostenerse en datos reales, lo que da la pauta para que el arqueólogo "invente" edificios. 

Sabíamos que habían entradas con jeroglíficos en las jambas y dinteles; los encontramos completamente libres de escombro y limpias como si los años no hubieran pasado por ellos. Más arriba el trabajo no había llegado y el sitio estaba convertido en montículos

Entre los restos pudimos ver varias secciones de decoración geométrica característica del estilo Puuc, sin embargo no podíamos ver otra cosa excepto piedras amontonadas y en uno de los lados la reluciente parte superior de las habitaciones que vimos en un principio.
Muro con personajes

Vimos restos de muro en un rincón y nos llevamos la mejor sorpresa del sitio pues la sección que pudimos observar tenía grabados varios individuos que aunque no estaban completos mostraban varios pares de piernas; se pudo apreciar que los personajes posiblemente estuvieron ataviados como guerreros.

Una vez que terminamos ahí, pasamos de nueva cuenta a Chunhuhub para dejar al custodio que nos acompañó y luego nos dirigimos al pueblo de Xculoc, donde Wilberth me iba a mostrar un sitio del que tenía buenos recuerdos...


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